Poemas de tragedia nacional… y personal

• Sandua, ese lugar cordobés, es de donde viene José Rodríguez Jiménez, un escritor y periodista que ya anda llegando a los sesenta años. Allá en su lugar de procedencia, España, fue director de un suplemento de cultura en el Diario Córdoba. Pero ahora reside en Guadalajara, Jalisco, México. Y ha puesto un establecimiento, un pequeño restaurante-café en donde sigue fomentando la cultura.

Por: La Otra Crónica

Guadalajara, Jalisco, México

22 de mayo del 2015

El miércoles 20 de mayo un par de amigos y compañeros de trabajo fueron invitados para leer poemas, sus poemas y otros más. Marco Antonio Gabriel García y El eNe, un tal Daniel Cabrera, estuvieron poemeando y choreando. Pues para Marcos, quien además es dueño de la editorial El Viaje, el ir a leer poemas es un ejercicio también para platicar con los asistentes, “si no pues cada quien se compra un libro, y lo lee en su casa y se acabo”, dijo.

Los dos poetas ya tienen trayectoria dentro de la escena poemaría de Guadalajara. Además tienen proyectos como los libros «cartoneros».

La propuesta que abren estos espacios, como el café restaurante Sandua, para poder dar a conocer el talento de escritores de Guadalajara, y no solo de la ciudad ya que Daniel Cabrera es oriundo de Pachuca, Hidalgo, sin embrago actualmente reside en la capital de Jalisco, crece cada día en muchos de los espacios. Sin duda Guadalajara tiene un momento de auge de sus escritores, pues tan solo la editorial El Viaje tiene una veintena de autores tapatíos, que cada vez, crece más.

La noche del miércoles la abrió Marco Antonio con su poema “Perros rabiosos”, el cual dijo hace referencia a los policías que reprimieron la manifestación con contra de la globalización ocurrida durante la Cumbre de las Américas en esta ciudad. Perros policías, que después de estar encerrados por 24 horas, salen en busca de expulsar la rabia que les ha dado el exilió, separados de la sociedad por un pequeño tiempo. Sin embargo recuerda que a los que encarcelaron, de los manifestantes en los cuales se incluye, los privaron de su libertad por más dos días.

Estos dos poetas leyeron un poco más de una hora. Pasaron de las tragedias nacionales, a las tragedias personales. Buscaron la forma de ir al hilo, uno a uno, tratando de poder contar anécdotas semejantes desde distintas vidas. El eNe en ocasiones memorizaba sus textos para lanzarlos al público como si de un juglar se tratara.

Ir de la borrachera de un señor solo, y no desolado que no es lo mismo, a la amistad que se tienen las personas y que por cuestiones de la vida se trasladan a otras geografías y se separan. Así fue como Marco recordaba a su amigo de borracheras, mientras que Daniel mencionó el origen de la portada de uno de sus libros, De lugar ninguno, al re memorizar y traer a su mente a uno de sus amigos que se volvió bailarina de cabaret, y que su hija de 6 años le decía “que bonita te vez con zapatillas papá”.

Así pasó la noche, en donde una de las frases más contundentes fue “procuró tener pocas cosas en casa para no pagar renta”.

Sandua, pues, es el lugar en donde se llevó a cabo dicha lectura. Un café en donde su dueño atiende con mucha cordialidad, y al que se puede también ir a comer típicos platillos españoles, y a ver una galería de arte que alberga en una sala idónea para una reunión en cualquier día de invierno.